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listado de poemas en audio por primeros versos letra e

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579 poemas con la letra "e"

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El velero lustroso de la muerte... de Vicente Gerbasi
El velero lustroso de la muerte pasea tu silencio por mis mares sombríos, entre brillos de un agua negra en ondas, donde cantan marinos de otro tiempo, ahogados en la noche, rendidos a las algas que transportan las sombras. Y siempre vienes a mí desde el olvido, aventurero terrestre...
El verso humano pesa... de Pedro Garfias
El verso humano pesa. Yo lo cojo en mis manos y siento que me dobla las muñecas. Mi traspiés juega mal con el camino y mi dolor contigo, oh blanca primavera. A veces de lo hondo del silencio que bordean las flores y la brisa acude el largo grito a mi garganta. La primavera rápida se esquiva, se rompe en mil pedazos...
En el desierto de olmos de José Watanabe
El viejo talador de espinos para carbón de palo cuelga en el dintel de su cabaña una obstinada lámpara de querosene, y sobre la arena se extiende un semicírculo de luz hospitalaria. Este es nuestro pequeño espacio de confianza. Más allá de la sutil frontera, en la oscuridad, nos...
Motivo bañado de luna de Stella Sierra
El viento peina la sombra que se ha mojado de luna. La luna besa la huella de su esperanza desnuda. ¡Media luna de los vientos, media luna de la espuma.....! (¡La sombra dejó olvidado su peine de media luna....!) En el cáliz de un lucero una ojera azul fulgura. El viento peina la sombra que se ha mojado de luna...
Libélulas de Saúl Ibargoyen
El viento salta desde los más lejanos verdores de la ceiba: rompe las confusiones de la luz: destruye el perfecto temblor de un vuelo transparente. De espaldas en la alberca la libélula no puede gritar los colores de su muerte: sus quietos dientes aún se ocupan de un hígado de...
Versos del vino de Saúl Ibargoyen
El vino no se bebe el vino se vive. El vino es el cielo del infierno. El beso nace en la boca la boca nace en el vino. Vino de muchas jarras hay en este vino. El fuego del vino es oscuro como el amor. Sólo merece su vino aquel que en el vino muere. Ganarás el vino con el chocar de tu copa...
Chela de Juan Daniel Perrotta
Ella dice que aprendió bien las lecciones del Maestro y se hace cargo de su doble rol de trabajadora ama de casa Sale del trabajo toma un taxi llama a la nena por el celular para que tome los globulitos con Cyna todo estará bien Está contenta de comprar una edición en rústica de Alice Bailey...
El amor de Antonio Porpetta
Ella duerme despacio con un lento galope de gacelas reclinado en su frente. Es hermosa como una fruta fresca, como un ágata, como un tallado capitel. Escucho la lejana andadura de sus párpados, el navegar inmóvil de su olvido, su exacta placidez de hierbabuena. Una fragancia leve de...
Definiciones de Eduardo Langagne
Ella está hecha a semejanza de las cosas que amo. Se parece a la noche, o mejor: a una noche sin ausencias. Ella es exacta. Cuando la noche escurre, su cuerpo se humedece. Me permite trepar por mis temblores y agitar su nombre desde la oscuridad. Ella es irrepetible...
Mujer en su ventana de Olga Orozco
Ella está sumergida en su ventana contemplando las brasas del anochecer, posible todavía. Todo fue consumado en su destino, definitivamente inalterable desde ahora como el mar en un cuadro, y sin embargo el cielo continúa pasando con sus angelicales procesiones. Ningún pato salvaje...
Canción del amor lejano de José Ángel Buesa
Ella no fue entre todas, la más bella, pero me dio el amor más hondo y largo. Otras me amaron más, y, sin embargo, a ninguna la quise como a ella. Acaso fue porque la amé de lejos, como una estrella desde mi ventana... Y la estrella que brilla más lejana nos parece que tiene mas...
El ruiseñor de Alberto Blanco
Ella soñó hace mucho tiempo este mismo sueño musical. Ahora lo traigo a la memoria. El camino estaba bordeado de estrellas, los lirios pesaban en plena noche y ella me sugería la silueta de un ciprés estremecido. Del túnel vimos salir a la luna seguida de otras máquinas brillantes...
Los demás de la foto de Eduardo Langagne
ella temía que el amor que me tenía fuera mayor al amor que yo a ella le tenía y prefirió dejar de dar amor al amor que me tenía ella tiene ahora a quien darle el amor que me tenía el que no quiso darme a mí cuando tenía mi amor que era mayor al amor que a mí ella me tenía...
Ello es que el lugar donde me pongo... de César Vallejo
Ello es que el lugar donde me pongo el pantalón, es una casa donde me quito la camisa en alta voz y donde tengo un suelo, un alma, un mapa de mi España. Ahora mismo hablaba de mí conmigo, y ponía sobre un pequeño libro un pan tremendo y he, luego, hecho el traslado, he trasladado,...
Extraños en la ciudad de Odette Alonso
Ellos nos vieron con sus ojos de vidrio algo nos delatabanos declaraba inmunes éramos dos extraños en la ciudad neutral y lo sabían. Qué podían hacer las ciudades neutrales son un banco de arena indiferente una llanura virgen. Nadie levanta su dedo ante el viajero nadie acusa al que...
Dieciocho de noviembre de Carlos Murciano
Ellos son enemigos del silencio y de la sombra. Con sus voces torpes encienden una luz en el pasillo e inventan la canción, la estrenan. Vienen hasta mi puerta, empujan, abren, entran, irrumpen en mis versos, interrumpen mi soledad y al suelo la derriban, trepan hasta mis piernas, me...
La canción desesperada de Pablo Neruda
Emerge tu recuerdo de la noche en que estoy. El río anuda al mar su lamento obstinado. Abandonado como los muelles en el alba. Es la hora de partir, oh abandonado! Sobre mi corazón llueven frías corolas. Oh sentina de escombros, feroz cueva de náufragos! En ti se acumularon las...
La guitarra de Federico García Lorca
Empieza el llanto de la guitarra. Se rompen las copas de la madrugada. Empieza el llanto de la guitarra. Es inútil callarla. Es imposible callarla. Llora monótona como llora el agua, como llora el viento sobre la nevada. Es imposible callarla. Llora por cosas lejanas. Arena del Sur...
Del rigor en la ciencia de Jorge Luis Borges
En aquel Imperio, el Arte de la Cartografía logró tal Perfección que el Mapa de una sola Provincia ocupaba toda una Ciudad, y el Mapa del Imperio, toda una Provincia. Con el tiempo, estos Mapas Desmesurados no satisficieron y los Colegios de Cartógrafos levantaron un Mapa del...
Evangelio del día de Manuel Mantero
En aquel tiempo un joven se acercó a Jesús entre a turba. Por sus ropas y el uso de su hablar supieron todos que era de otra tierra. Señor, ¿qué haré para salvarme? Sé puro. (¡Oh, lecho sosteniendo barro y llama, airadas ingles, lucha sin fin; azada y cúpula!)...
Sellada vigilia de Cintio Vitier
En aquella ciudad morada y mustia los mulos del carbón, los níveos pescadores escanciaban la forma serena de mi angustia, iniciaron el fúnebre ajedrez de sus rumores. Era mi vida un sueño confuso de hondos seres, los ojos inflexibles de ilusión se me abrían a beberle...
Tercer poema del viaje de Agustín Labrada Aguilera
En casa esperaron las noticias del viaje. Mis cartas eran un falso testimonio cuando dejé escaparse el aguacero, sin retener sus gotas en los párpados. Entre duda y acción: toda la agonía, y en ella he tejido los fragmentos que una vez alegraron nuestro estar en el mundo. Este año es...
Romance de Rosaflorida de Romancero Español
En Castilla está un castillo, que se llama Rocafrida; al castillo llaman Roca, y a la fonte llaman Frida. El pie tenía de oro y almenas de plata fina; entre almena y almena está una piedra zafira; tanto relumbra de noche como el sol a mediodía...
La almohada de Enrique Larreta
En ceniza de amores enfundada y en ausencias de vida numerosa; con esa misma suavidad sinuosa de otro doble frescor, mi buena almohada, tú me quedas al menos. Eres nada y eres todo por último. La cosa consubstancial del sueño. Sigilosa barca del alma, en alma transformada...
Yankilandia de Juan Marín
En Chicago chorizos de esterlinas, libertades de piedra en New York. Conquistaron las tierras y los mares, partieron continentes a patadas, Gorgas, Roosevelt y Ford. Muchas estrellas en el cielo a secas que rociara en champagne Clemenceau; catorce puntos Woodrow Wilson sueña puestas las manos en los Evangelios...
Himno de la victoria de Juan Gelman
en ciertas circunstancias) en madrugada en pleno su esplendor quién sino yo como ginebras destruyendo a sus víctimas amadas para dar luz a la indecisa claridad de sus mesas quién sino yo con papelitos lujosas descripciones hechas para callar o la palabra mesa las mentiras los metros de mentiras...
Cierto país de Marco Antonio Montes de Oca
En cierto país, conocido por mí desde su edad larvaria (cuando apenas era en el mapa un punto rojo y vehemente), los habitantes, una vez al año, emprenden viaje masivo hacia las estribaciones del monte Zeta. Al frente van niños muy fuertes conduciendo a los hombres en vistosos palanquines...
Barroco de Antología Poética 3 BARROCO
En construcción
En cuanto a la imaginación de las piedras de Gonzalo Rojas
En cuanto a la imaginación de las piedras casi todo lo de carácter copioso es poco fidedigno: de lejos sin discusión su preñez animal es otra, coetáneas de las altísimas no vienen de las estrellas, su naturaleza no es alquímica sino música, pocas son palomas, casi todas son...
Exaltación de las materias elementales de Xavier Abril
En desnudez intacta, escalofrío, desmayo y sueño. Debajo de sus senos nace un río que olvida los temblores de su cuerpo). ¿Te quieres dar a mí hasta palidecer desmayada en la noche? ¿Y que tu cabellera encienda los trópicos íntimos del amor? ¿Sentir la claridad del alba anegada en tus senos?...
Boca de Griselda Álvarez Ponce de León
En donde la sonrisa es un suceso, agresor el contorno de castigo, el labio al rastrear, como enemigo, la mordida ritual y nido el beso, en donde tiembla el corazón opreso porque al salirse quiere estar conmigo, de otra finalidad su fin desligo: forjada solamente para el beso. Y sube...
Pájaro de Giovanni Quessep
En el aire hay un pájaro muerto; quién sabe adónde iba ni de dónde ha venido. ¿Qué bosques traía, qué músicas deja, qué dolores envuelven su cuerpo? ¿En cuál memoria quedará como diamante, como pequeña hoja de una selva desconocida? Pero en el aire hay un patio y una pradera, hay una torre y una ventana...
En el alféizar calado... de José Martí
En el alféizar calado De la ventana moruna, Pálido como la luna, Medita un enamorado. Pálida, en su canapé De seda tórtola y roja, Eva, callada, deshoja Una violeta en el té. XVI De : Ismaelillo, La edad de oro, Versos...
Los chichimecas de Poesía náhuatl
En el año 5-Caña vinieron a acercarse los chichimecas: vivían como flechadores (cazadores), no tenían casas, no tenían tierras, su vestido no eran tilmas tejidas, solamente pieles de animal era su vestido, sólo con yerba hacían su vestido. Sus hijos sólo en redecillas en huacales...
Adolescencia de Juan Ramón Jiménez
En el balcón, un instante nos quedamos los dos solos. Desde la dulce mañana de aquel día, éramos novios. El paisaje soñoliento dormía sus vagos tonos, bajo el cielo gris y rosa del crepúsculo de otoño. Le dije que iba a besada; bajó, serena, los ojos y me ofreció sus mejillas, como quien pierde un tesoro...
En el bote iba remando... de José Martí
En el bote iba remando Por el lago seductor, Con el sol que era oro puro Y en el alma más de un sol. Y a mis pies vi de repente, Ofendido del hedor Un pez muerto, un pez hediondo En el bote remador. XII De : Ismaelillo, La edad de oro, Versos...
Navegaciones de Homero Aridjis
en el círculo de llamas esta danza el movimiento de su pecho a la derecha y el de sus caderas a la izquierda el animal de la creación en un solo dibujo siempre sagrado sobre el suelo ardiente señora de la danzase cubre a sí misma como Tetis cubrió a Aquiles pero deja como aquélla una parte de su cuerpo vulnerable...
Amplificaciones de Xavier Villaurrutia
En el cuarto del pueblo fantástico y desnudo, amarillo de luz de vela, sobrecogido, mis sienes dan la hora en no sé qué reloj puntual y eterno. La soledad se agranda como las sombras en la sábana del muro, como las caras ayer asomadas para dentro en el marco de sus ventanas. Y el...
Precio de la verdad de Carlos Bousoño
En el desván antiguo de raída memoria, detrás de la cuchara de palo con carcoma, tras el vestuario viejo ha de encontrarse, o junto al muro desconchado, en el polvo de siglos. Ha de encontrarse acaso más allá del pálido gesto de una mano vieja de algún mendigo, o en la ruina del alma...
El violinista suicida de Carlos Samayoa Aguilar
En el desván, muy solo, sombríamente solo de un sonoro silencio circuido, el violín empolvado sueña y duerme, Sin el dulce consuelo de un sonido Ha mucho que las manos milagrosas Del virtuoso exquisito ya no existen. Y él se ha quedado así, afluado y firme. Dulce y solo. Esperando...
A mi amada de Roberto Fernández Retamar
En el Día de los Enamorados, el domingo, he despedido a mi amada. Subió al ómnibus de la mano de su compañero, Que en la otra mano llevaba una guitarra remendada. Se sentaron sonrientes en el primer asiento: ella ocultaba su tristeza con un giro de sus bellos ojos, Y él estaba ya...
El miedo de Alejandra Pizarnik
En el eco de mis muertes aún hay miedo. ¿Sabes tú del miedo? Sé del miedo cuando digo mi nombre. Es el miedo, el miedo con sombrero negro escondiendo ratas en mi sangre, o el miedo con labios muertos bebiendo mis deseos...
A un hijo de españoles de Miguel de Unamuno
En el entierro del niño Yago de Luna muerto de meningitis tuberculosa a los ocho meses de edad y enterrado en el cementerio parisiense de Pantin, el 14 de noviembre de 1924. A un hijo de españoles arropamos hoy en tierra francesa; el inocente se apagó ¡feliz él! sin que su mente se...
Sonatina. En el espejo he visto el Mar... de León de Greiff
En el espejo he visto el Mar, el Mar sordo. La cimera cubríanle nubes grávidas de borrasca, la faz en movimiento delirante bullía con un hervor preñado de mútilos cadáveres cárdenos, a la deriva. Cegaba con telones cinéreos la angustia, propugnando saltar de las órbitas adamantina...
Transmutación de Alejandro Aura
En el espejo retrovisor se proyecta su boca besucona no veo sus ojos yo a solas desde acá soy alma de los dos y ambos allá somos la boca. De: Causa de vida
En el extraño bazar... de José Martí
En el extraño bazar Del amor, junto a la mar, La perla triste y sin par Le tocó por suerte a Agar. Agar de tanto tenerla Al pecho, de tanto verla Agar, llegó a aborrecerla; Majó, tiró al mar la perla. Y cuando Agar, venenosa De inútil furia, y llorosa, Pidió al mar la perla hermosa,...
Lecho de helechos de Octavio Paz
En el fin del mundo, frente a un paisaje de ojos inmensos, adoro mecidos pero aún chisporroteantes, aún destellantes, me miras con tu mirada última la mirada que pierde cielo . La playa se cubre de miradas absortas, escamas resplandecientes. Se retira la ola de oro líquido. Tendida sobre la lava que huye...
Madrigal escrito en invierno de Pablo Neruda
En el fondo del mar profundo, en la noche de largas listas, como un caballo cruza corriendo tu callado callado nombre. Alójame en tu espalda, ay refúgiame, aparéceme en tu espejo, de pronto, sobre la hoja solitaria, nocturna, brotando de lo oscuro, detrás de ti. Flor de la dulce luz...
Dulce silencioso pensamiento de Miguel de Unamuno
En el fondo las risas de mis hijos; yo sentado al amor de la camilla; Herodoto me ofrece rica cilla del eterno saber, y entre acertijos de la Pitia venal, cuentos prolijos, realce de la eterna maravilla de nuestro sino. Frente a mí en...
Ruiseñores de nuevo de Juan Gelman
en el gran cielo de la poesía/mejor dicho/ en la tierra o mundo de la poesía que incluye cielos/astrosdioses/mortales está cantando el ruiseñor de keats/siempre/ pasa rimbaud empuñando sus 17 años como la llama de amor viva desan juan/ a la teresa se le dobla el dolor y su caballo...