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25 poemas aleatorios

 

   Un cortesano, estando pensativo...

   Francisco López de Villalobos

primeros versos

UN CORTESANO, ESTANDO PENSATIVO, FUE PREGUNTADO POR SU DAMA QUE EN QUÉ PENSABA, Y ÉL LE RESPONDIÓ ESTE MOTE: Pienso que mi pensamiento no piensa que soy yo. GLOSA Si por pensar enojaros pensase no aborreceros, pensaría en no quereros por no pensar ...

 

   Exterior del gato

   Carlos Barral

primeros versos

Ser el gato, hacer un esfuerzo y ser el gato transitorio del alba y en la cumbre del mundo transitado, y presumible. Ser por fuera del gato todo el gato posible después del atigrado resplandor de la noche última y la pasmada contracción felina. Comenzar en el zinc al borde de las uñas, ...

 

   Urgente

   Luis Eduardo Rendón

primeros versos

Bajaremos del Himalaya en bicicletas silenciosas y perfumadas, a las doce de la noche Vicente Huidobro-Jean Arp. Traer a los hospitales el agua bendita de la luna bailar descalzos en los museos encontrarnos en el Océano Pacífico del piano jugar ajedrez en cumbres nevadas ...

 

   Epigrama

   Ibn Sara As-Santarini

primeros versos

La elocuencia reparte sus dones entre los poetas y vosotros; reparto injusto, favorable a unos y contrario a los otros: cuando recitan fluye de sus bocas la miel de las abejas, mientras sus aguijones en vuestros culos se clavan. ...

 

   Delira el hombre

   Juan Ríos

primeros versos

Certeza de estar aquí para siempre, no angélicas ilusiones —opios celestes—, quiere el Hombre, y su delgada muerte delira: Zarpazo de la mañana, lívido mediodía, cabeza ebria del tiempo, sombría permanencia, vino de los abismos, brutal brebaje eterno: ¡Yo veo, yo palpo, yo...

 

   Cada día el cadáver

   Juan Vicente Piqueras

primeros versos

Yo albergué un día en mi voz a huéspedes sublimes: convidados de miel, reyes en ruinas, madres antiguas, caracolas, toros. No sé por qué se han ido y me han dejado solo, contemplando cada día el cadáver...

 

   Eunicianas (IV)

   Lil Picado

primeros versos

Acusada de amor imprudencial y excesos en el brillo metafórico, de no andar por el centro de los lados ni pagar el impuesto a tu belleza. De moverte con gesto desafiante y una rara cadencia libertaria. De incorrección política frente a todos los bandos. De erotismo torcaz y osadía mística. ...

 

   Fotografía

   Armando Rubio Huidobro

primeros versos

Si la vida consiste en poner caras pondré unos ojos dulces y labios sonrientes, para que Dios, fotógrafo en las nubes, complete su álbum familiar. Selección: Guido Ferrer

 

   Sobre la fronda y la medida

   Jeannette Lozano

primeros versos

Cada nombre encierra una discordia en la raíz, sed que hunde y alza nuestros pensamientos hacia lo blanco de los nardos. A veces nos preguntamos si el paisaje entrega su fronda para resguardar o para hacernos avanzar hacia el color de la inmersión. ...

 

   El puñal

   Jorge Luis Borges

primeros versos

A Margarita Bunge En un cajón hay un puñal. Fue forjado en Toledo, a fines del siglo pasado; Luis Me- lián Lafinur se lo dio a mi padre, que lo trajo del Uru- guay; Evaristo Carriego lo tuvo alguna vez en la mano. Quienes lo ven tienen que jugar un rato con él; se advier- te que hace mucho ...

 

   Sueños y «volantines»

   José de Diego y Benitez

primeros versos

El Cerro de las Animas benditas se llama un montecillo de mi pueblo; extraño nombre que le dio la gente -- segun afirman los que saben de ello -- porque, como se eleva en grácil curva precisamente por detrás del templo, donde reciben el adios del mundo los que retornan de la tierra al seno, ...

 

   Letanía

   Francisco Urondo

primeros versos

Con toda la vida por delante sólo queda pensar en la muerte. El rencor sube a mi garganta y vuela con mi destino como un vómito, como un pájaro: la vida que empujo, la que arrastro.

 

   Instantánea

   Carmen Alardín

primeros versos

Quién pudiera decir que estás presente aunque tu audiencia duerma en las ventanas, aunque tu ausencia siempre inexplicable te convierta en pasado repentino. Quién pudiera decir que estamos juntos celebrando el milagro de las bodas, aunque un fúnebre viento nos transporte...

 

   A Rubén Darío y otros cómplices

   Leopoldo Lugones

primeros versos

Habéis de saber Que en cuitas de amor, Por una mujer Padezco dolor. Esa mujer es la luna, Que en azar de amable guerra, Va arrastrando por la tierra Mi esperanza y mi fortuna. La novia eterna y lejana A cuya nívea belleza Mi enamorada cabeza Va blanqueando cana a cana. Lunar blancura ...

 

   Sobre la costilla de Adán y otras nimiedades

   Juan Daniel Perrotta

primeros versos

Hay quienes creen que el hombre necesita una mujer -está la tercera posición pero no viene al caso- Algunos votan por una santa mujer otros opinan que no estaría mal una fémina que se dedique al arte de las que te hacen todos los dibujos Habrá los que se inclinen por una gallina ...

 

   Me siento morir a veces...

   Angélica Becker

primeros versos

A Emilia y José Ángel Valente. Me siento morir a veces, o deseo la muerte. Alguien me obliga a desvestirme lentamente de mis extremidades, de mis brazos y piernas, de mi vientre y mi pecho. Una a una, caen todas mis prendas personales en un gesto muy dulce. Me siento polvo, ceniza, ...

 

   La vida igual que el golf

   Belén Reyes

primeros versos

Sólo es para el burgués. Y los demás sabéis que sin jugar Siempre perdéis... Pero entendéis mucho más que ellos de palos . La vida igual que el golf Un imperfecto swing.Y la esperanza se nos pierde en el rough del desencanto. La vida igual que el golf, un bunker de nostalgia ...

 

   Abuelos (VIII)

   José Antonio Cedrón

primeros versos

Más tarde nos pusieron en la fila del medio y esperamos el turno en los pañuelos (a los que no podían le arrimaron la cara). Quise pensar su piel como una fruta como el rostro de Ana temblándome en la espalda y no un pueblo perdido que se iba apretado en el frío de sus ...

 

   De 2 a 3

   Rafael Alberti

primeros versos

Las dos, en la vaquería. La luna borda un mantel, cantando, en mi galería. Una niña chica, sin cuna, jugando. La Virgen María la está custodiando. Tres gatitos grises y un mirlo enlutado, la araña hilandera y el pez colorado. Un blanco elefante y un pardo camello, y toda la flora del aire ...

 

   Despojos

   Carmen Alardín

primeros versos

De noche alguien evoca la esperanza. Ella nos habla de las cicatrices que va cubriendo el tiempo. Y tú, dentro del aire, allá muy...

 

   Raritan blues

   Eduardo Chirinos

primeros versos

Para Margarita Sánchez Aquí no hay bulla ni miseria, sólo un bosque de árboles mojados y cientos de ardillas correteando vivaces o escarbando una nuez. A lo lejos un puente una interminable fila de automóviles retorna a sus hogares y nubes balando ante un perro pastor y amarillo. ...

 

   Manifiesto del amor

   Víctor Corcoba Herrero

primeros versos

Quise medir el amor con los labios del mar, y el mar me bañó de versos con los labios de tu boca. Tu boca es el olvido del yo y la memoria del alma que se funde y se confunde. Porque el amor es la necesidad de salir de uno mismo y de entrar en el otro como luna en la mar. ...

 

   Los sueños escondidos

   Marisa Trejo Sirvent

primeros versos

Yo quería hablar de ti al recordarte de un bosque o de una playa, de la arena y el musgo rozando nuestra pie. Me hubiera gustado decir que hicimos sonar un caracol gigante y que el sol caía sobre el mar mientras hacías el amor. Pero ni modos, No se pudo. Yo quería hablar de todas esas cosas . ...

 

   Bienaventurado el hombre (Salmo 1)

   Ernesto Cardenal

primeros versos

Bienaventurado el hombre que no sigue las consignas del Partido ni asiste a sus mítines ni se sienta a la mesa con los gánsters ni con los Generales en el Consejo de Guerra Bienaventurado el hombre que no espía a su hermano ni delata a su compañero de colegio ...

 

   Invitación

   Silvia Elena Regalado

primeros versos

Mujer de treinta y tres, desaforadamente loca -pero de apariencia cuerda- jefa de una familia que no le respeta su nivel jerárquico, sólo cuando se lo toma en serio y haciendo uso legal de sus derechos ejerce la violencia maternal establecida. Le hace a usted una invitación clara, ...