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Paisaje

Estaba solo el día

El guardián de la planta desalinizadora
nos señaló el camino

Desde el cementerio veíamos
su camisa estridente

y el vago gesto de sus manos

                    Estas mujeres

El agua y el aire
habían desdibujado las inscripciones

sobre las viejas lápidas

                    Recuerdo de sus padres y de sus hermanos

Hay más muertos que vivos sobre la tierra
dijiste

cuando el chillido del ave rasgó el cielo
del poblado desierto


De: La Quietud, 1998
Poema proporcionado por la autora


YOLANDA PANTIN




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