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Presagio

Nada en el mundo te alcanza todavía:
son tus labios de sombra,
y tu voz un fantasma.

Has surgido a la luz para mis ojos,
y te aumenta mi sangre,
y te encumbran mis venas.

Ya sin saberlo te acercas a tu forma,
y encenderás la llama
en la incesante noche que te espera.

Y sin saberlo escribirás tu nombre,
tu no nacido nombre, entre mis labios.


BLANCA LUZ PULIDO




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