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JOSÉ ZORRILLA

 

   A buen juez, mejor testigo (Conclusión)

primeros versos

Las vanidades del mundo renunció allí mismo Inés, y espantado de sí propio Diego Martínez también. Los escribanos, temblando dieron de esta escena fe, firmando como testigos cuantos hubieron poder. Fundóse un aniversario y una capilla con él, y don Pedro de Alarcón el altar ordenó hacer, ...

 

   A buen juez, mejor testigo IV

primeros versos

IV Así por sus altos fines dispone y permite el cielo que puedan mudar al hombre fortuna, poder y tiempo. A Flandes partió Martínez de soldado aventurero, y por su suerte y hazañas allí capitán le hicieron. Según alzaba en honores alzábase en pensamientos, y tanto ayudó en la guerra con su valor ...

 

   A buen juez, mejor testigo V

primeros versos

V Era entonces de Toledo por el rey, gobernador, el justiciero y valiente don Pedro Ruiz de Alarcón. Muchos años por su patria el buen viejo peleó; cercenado tiene un brazo, mas entero el corazón. La mesa tiene delante, los jueces en derredor, los corchetes a la puerta y en la derecha el bastón. ...

 

   A buen juez, mejor testigo VI

primeros versos

VI Es una tarde serena, cuya luz tornasolada del purpurino horizonte blandamente se derrama. Plácido aroma de flores sus hojas plegando exhalan, y el céfiro entre perfumes mece las trémulas alas. Brillan abajo en el valle con suave rumor las aguas, y las aves en la orilla despidiendo ...

 

   A buen juez, mejor testigo I

primeros versos

Tradición de Toledo I Entre pardos nubarrones pasando la blanca luna, con resplandor fugitivo, la baja tierra no alumbra. La brisa con frescas alas juguetona no murmura, y las veletas no giran entre la cruz y la cúpula. Tal vez un pálido rayo la opaca atmósfera cruza, y unas en otras las sombras ...

 

   A buen juez, mejor testigo II

primeros versos

II Clara, apacible y serena pasa la siguiente tarde, y el sol tocando su ocaso apaga su luz gigante; se ve la imperial Toledo dorada por los remates, como una ciudad de grana coronada de cristales. El Tajo por entre rocas sus anchos cimientos lame, dibujando en las arenas las ondas ...

 

   A buen juez, mejor testigo III

primeros versos

III Pasó un día y otro día un mes y otro mes pasó, y un año pasado había, mas de Flandes no volvía Diego, que a Flandes partió. Lloraba la bella Inés oraba un mes y otro mes su vuelta aguardando en vano, del crucifijo a los pies do puso el galán su mano. Todas las tardes venia después ...

 

   Corriendo va por la vega

primeros versos

Corriendo van por la vega a las puertas de Granada hasta cuarenta gomeles y el capitán que los manda. Al entrar en la ciudad, parando su yegua blanca, le dijo éste a una mujer que entre sus brazos lloraba: Enjuga el llanto, cristiana no me atormentes así, que tengo yo, mi sultana, un nuevo Edén para ti. ...

 

   Dueña de la negra toca

primeros versos

Dueña de la negra toca, la del morado monjil, por un beso de tu boca diera a Granada Boabdil. Diera la lanza mejor del Zenete más bizarro, y con su fresco verdor toda una orilla del Darro. Diera la fiesta de toros y, si fueran en sus manos, con la zambra de los moros el valor de los cristianos. ...