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DAVID ROSENMANN - TAUB

 

   Abismo

primeros versos

La sombra de la muerte en el umbral se para. Oh dandún, oh dandún, no le mires la cara. Cerca, una madrugada te aguardaba con hambre de tus miembros apenas palpados por el mundo, y te daba el arrullo dulcísimo del sueño desde dentro de un sueño borroso, inacabable. ...

 

   Al Rey su trono (fragmentos)

primeros versos

XV El día de la resurrección habrá rebeldes. XVII La novela de Dios. Una hoja manchada con sombra roja. De: Al rey su trono Selección: Guido Ferrer

 

   Alumbramiento

primeros versos

Oh henchido vientre, vientre luminoso, la hora del mundo estalla; abre las alas: suma claridad rodea la granada. Asoma, rayo de materna luna: conoce el aire, mueve las entrañas; manantial esperado, entrega el ronco bramido: ciega lanza. Oh bendita placenta nacarada. ...

 

   Ataraxia (Ananda primera)

primeros versos

De rodillas el Árbol. Caigo sobre mis ojos: me acompaño: sólo tengo caminos. La luz clama: ¡Estoy ciega! Cunde frescos sentidos el ansia, polvorienta, disoluta. Los pies del cielo con mis pies tropiezan. Vetusto claroscuro: caminos y caminos y ninguna huella. Jamás el mundo. ...

 

   Creación

primeros versos

Víscera, fruto vagando en la niebla, entre mil soles vagando en la niebla, víscera, fruto vagando sin tiempo, entrevenoso, ascendiendo insolado, cántico, bosque de astros, estepa, ¿de qué región tropezando, cayendo? Bloque de semen, radiante, aguerrido, ¿por qué designio vienes a ser mío? ...

 

   El Cielo en la fuente (fragmentos)

primeros versos

XVII La rosa hacia la rosa: los ardores ondulan y sucumben. Como lo mío antes de mí, Jesusa en otro corazón. ¿No buscará descanso? En una página de arena y miedo lee su nombre. Fardos los dominios. Habrá murallas,

 

   El día

primeros versos

(II) Doce de junio. Hablé. Nosotros lo comprenderíamos. ¿Iba la noche a retener tu entrega? Por la ventana el mar que nos separa. Seremos uno interminablemente. Ahora estás conmigo. Qué seguro, qué distinto es el ser: en su coraje me alcanzas. ¡Para siempre! Los poderes, ...

 

   El Manantial

primeros versos

Quién eres tú? ¿Quién eres tú? ¿Quién eres al alba, a la noche, a la tarde? ¿No es el amor tu imagen? Yo crecía, y crecías tú. ¡A nosotros crecíamos! Tomamos los racimos. ¿No es el amor mi imagen? Dolías en el llano de las cosas que rompen. En las cosas que abaten yo dolía. ...

 

   El raudal

primeros versos

Yo canto como el sol, y el sol no canta. Yo sueño como Dios, y Dios no sueña. Yo, cual la tierra, muero, y la tierra no muere, ¡pero canta! De: Cuadernos de Poesía Selección: Guido Ferrer

 

   Hijo

primeros versos

Árbol huracanado, violenta tierra viva: para tus olas hiende mi corazón la luz; sea el ímpetu el sueño que te cubra, hijo mío; yo seré el edredón de la cuesta dormida. Eterno lampo eterno surja para tus ojos; empuja hacia tu sangre mi sangrienta ternura; eres la despedida de mis bríos ...

 

   La Víspera (Ananda segunda)

primeros versos

¿Vinieron ellos?Sí.¿También Él?Sí, también.¿Cenaron ellos?Sí.¿Y Él, dime, y Él cenó, dime, cenó?No sé, no sé.*** Yo sí lo sé, y, también la cena, que se heló. De: Los despojos del Sol Selección: Guido Ferrer

 

   Pagano

primeros versos

I Mas otras voces hablan a otras voces. Mas otros ríos bañan a otros hombres. Y yo estoy lejos, sumamente lejos. Ulula el huracán entre los montes. Grita el torrente con revueltos bronces. Y yo en lo lejos permanezco ajeno. Páramo de otros nombres, otros nombres. Otra febril majada, ...

 

   Pórtico

primeros versos

Pastor dormido en la hierba, tu caramillo sonando en la lejana pradera: ¿quién en tus manos, avena?, ¿quién en tus manos, alfalfa: pastor dormido en la hierba? El oso peludo, el rey juguetón, molinete, embudo, chinita de ron. El rey juguetón, girasol, dandún, chinita de ron, nata con betún. ...

 

   Preludio

primeros versos

Después, después el viento entre dos cimas, y el hermano alacrán que se encabrita, y las mareas rojas sobre el día. Voraz volcán: el nimbo pasaremos. El buitre morirá: laxo castigo. Después, después el grito entre dos víboras. Después la noche que no conocemos y extendido en lo nunca . ...

 

   Réquiem

primeros versos

Dandún, óyeme, dandún, no hay quién te saque, dandún: ni allá con la banderilla, ni aquí con demente luz. Trataro, mira, trataro, creo que te perderás: allá con la banderilla, aquí con serenidad. Ya se cerró tris pulsera, ya se cerró tris collar, aunque siempre te miremos no te veremos jamás. ...