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MÓNICA ALBIZÚREZ GIL


listado de poemas

 
Carnicera

dedos desgajando las penas de la infancia allí la carne viva la carne fresca y el cuchillo escarbando por fin el recuerdo

Dinosauria

Hay algo de dinosauria en mí de ojo limpio y torpe pisada de piel resistente llamada al exterminio en el cuello alto en los roncos gemidos en el espasmo algo de fósil cavernaria de saliva inmóvil de ternura y asco

Don Juan trasnochado

qué luego llegaste al panteón del arrepentimiento qué afán de penitencia ahora levanta el telón don tenorio la escena anterior fue tu engaño deja ya el ridículo te lo exigen estos tiempos Inés sobre la tumba te lo ordena

En el parqueo

entonces no encontré la contraseña y revolví y busqué y volví a revolver y tiré la bolsa y maldije y lloré porque algo estaba fuera de control abandonado en el sueño despojado y mudo como mi bolsa

Independencia

Estrangulada entre dos tiempos ella frente a la puerta el cordón umbilical revirtiéndose impredecible vínculo femenino atando fuertemente como nunca antes

Informática

Cuando ya no esperé encontrar tu nombre en la pantalla y no me asustó el silencio cuando ya no fuiste referencia en el tiempo cuando la lejanía fue real el olvido había borrado nuestros mejores archivos éramos dos usuarios anónimos en una intemperie infinita

La buena de la novela

a veces nostálgica me formulo las preguntas obstinadas de las novelas rosa y digo serás tú el hombre existe en verdad el destino y me ríoni destino ni hombre ni nada solo la ilusión pasajera el recuerdo lujurioso que se queda

Mi búnker

este es mi búnker mi refugio subterráneo el de estructuras firmes el incognoscible lo he bautizado

Mujer sola

Mejor signo de libertad no encuentro que esta noche a solas sin miedo al teléfono babeando deliciosamente la almohada la pierna atravesada el camisón enrollado oscuridad total como me gusta y la seguridad de que nadie perturbará mis sueños hasta que yo misma lo determine noche autónoma ...

Rutina

atrás quedan las luces de la oficina mis párpados signan los cansancios del día apenas si consigo acomodarme en el carro enciendo el motor me adentro en la avenida miserablemente despoblada cruzo a la izquierda y tu risa reflejada en el retrovisor se convierte ...

Serpiente

Repto en mi cama me enrosco tiro el veneno cambio de piel y duermo porque aquí está el paraíso y no hay evas ni adanes ni dioses sola yo y mi deliciosa manzana

Silencios

mi palabra es de pronto el vacío la inhóspita biblioteca por las tardes los corredores hondos del metro las esperas con asepsia de martirio y la pantalla negra spéculum inconfundible de un tiempo para siempre perdido

Teatro

Detrás de mi dócil palabra de mi sonrisa de mi erudición y de mis juegos la soledad esa a la que tu acostumbrado desgano ha convertido en una actriz maquillada de total felicidad contra la luz de la propia conciencia

Tiempo inaugurante

Segura en esta noche sabia y entera en que me basto a mí misma liberta ya de miedos y afectos permeable como nuncaa este tiempo incauto que llega