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listado de poemas en audio por primeros versos letra d

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841 poemas con la letra "d"

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Último momento de Jorge Boccanera
Distintas informaciones recibidas hoy de fuentes extraoficiales, indicarían un acercamiento entre tu corazón y el mío. Dichos voceros señalan, una cuestión de piel irremediable. Los observadores estiman que te amo. De: Música de fagot y piernas de Victoria
Iván de Juan Gelman
Distraído en la sucesión de imágenes el niño dice que quiere hablar. La cuchara, el aparador lleno de copas, la mesa larga familiar, el mantel, son continentes y países a los que llega con ojazos de buey y habita brevemente antes de volver a partir. El ámbito de un vaso le da un movimiento de mano ...
Sospecha crueldad disimulada, el alivio que la esperanza da de Sor Juana Inés de la Cruz
Diuturna enfermedad de la esperanza que así entretienes mis cansados años y en el fiel de los bienes y los daños tienes en equilibrio la balanza; que siempre suspendida en la tardanza de inclinarse, no dejan tus engaños que lleguen a excederse en sus tamaños la desesperación o la confianza: ...
Mi divina Lysis de Sor Juana Inés de la Cruz
Divina Lysis mía: perdona si me atrevo a llamarte así, cuando aun de ser tuya el nombre no merezco. A esto, no osadía es llamarte así, puesto que a ti te sobran rayos, si en mí pudiera haber atrevimientos. Error es de la lengua, que lo que dice imperio del dueño, en el dominio, ...
Alocución a la poesía (fragmento del poema América) de Andrés Bello
Divina poesía, tú, de la soledad habitadora, a consultar tus cantos enseñada con el silencio de la selva umbría; tú, a quien la verde gruta fue morada, y el eco de los montes compañía; tiempo es que dejes ya la culta Europa, que tu nativa rustiquez desama, y dirijas el vuelo ...
Ante la ausencia de Sor Juana Inés de la Cruz
Divino dueño mío, si al tiempo de partirme tiene mi amante pecho alientos de quejarse, oye mis penas, mira mis males. Aliéntese el dolor, si puede lamentarse, y a la vista de perderte mi corazón exhale llanto a la tierra, quejas al aire. Apenas tus favores quisieron coronarme, dichoso más que ...
Profecía de Merlín de Alfonso Onceno
Dixo: El el león d España de sangre fará carnino del lobo de la montaña dentro en la fuente del vino. Non quiso más declarar Merlín el de gran saber: yo quier paladinar como puedan entender: el león de la España fue el buen rey, ciertamiente; el lobo de la montaña fue don Juan, el su pariente; , ...
De cómo se dolía el león de Juan Ruiz, Arcipreste de Hita
Diz que yazié doliente el león de dolor; todas las animalias vinieron ver su señor; tomó plazer con ellas e sentióse mejor: alegráronse todas mucho por su amor. Por le fazer serviçio e más le alegrar, conbidáronle todas queAl darian a yantar; dixieron que mandase quáles quisiese matar; mandó ...
Notas para un blues de Ana Rossetti
DO lor por estar contigo en cada cosa. Por no dejar de estar contigo en cada cosa. Por estar irremediablemente contigo... en mí. RE cordar que mis monedas no me permiten adquirir. Que mi deseo no es tan poderoso como para taladrar blindajes, ni mi atrevimiento tan hábil ...
Misterios de pasión (Primero) de Ana Rossetti
Do you really want tu hurt me?Boy Georges Tomar el cáliz, el cáliz de tus manos, adentrarme hasta el fondo, hasta el vestigio último del tormento, no para combatirlo, no para decidir qué desesperación es la más soportable. Pues me abandono en ti, pues de mí me extravío, ...
Trilce (Poema LXVI) de César Vallejo
Dobla el dos de Noviembre. Estas sillas son buenas acogidas. La rama del presentimiento va, viene, sube, ondea sudorosa, fatigada en esta sala. Dobla triste el dos de Noviembre. Difuntos, qué bajo cortan vuestros dientes abolidos, repasando ciegos nervios, sin recordar la dura fibra...
Dobla el dos de noviembre de César Vallejo
Dobla el dos de Noviembre. Estas sillas son buenas acogidas. La rama del presentimiento va, viene, sube, ondea sudorosa, fatigada en esta sala. Dobla triste el dos de Noviembre. Difuntos, qué bajo cortan vuestros dientes abolidos, repasando ciegos nervios, sin recordar...
Lección de vida de Julio Flórez
Dobla el peso del agua, mientras llueve, del tupido trigal la espiga rubia. La espiga al doblegarse ávida bebe los copiosos diamantes de la lluvia. Esa espiga es la hostia. Es el tesoro universal y eterno, que convida a beber en su estuche de ámbar y oro el manjar más preciado...
Víspera hacia ti de José García Nieto
Doblaban en el viento las banderas de todos los adioses que esperabas. Caían copos blancos de chilabas por una despedida de palmeras. Dormida en las arenas de tu cuna quedó una huella de tus pies perdidos. Se levantaban ecos escondidos en las ciudades de color de luna. ...
El otro (III) de José Antonio Cedrón
Doblado entre sus ramas los miedos se deshojan unos a otros. El oscuro silencio le humedece los huesos. Y pedirá perdón, si regresan de nuevo a revisar la cama con un golpe mojado por la noche. El sueño sueña un bosque para evadir la culpa. Perdón, pide perdón. ...
Dote de Juana Rosa Pita
Doble el exilio nuestro: de la isla improbable que alimenta mitos y de la siempre verde ciudad soñada en prójima intención por algún mago etrusco. Doble la soledad: ser huérfanos de calles suficientes con vecinos de mármol (soportales) y carecer de techo que se preste al apremiante impulso ...
A través de Octavio Paz
Doblo la página del día, escribo lo que me dicta el movimiento de tus pestañas.* Entro en ti, veracidad de la tiniebla. Quiero las evidencias de lo obscuro, beber el vino negro: toma mis ojos y reviéntalos.* Una gota de noche sobre la punta de tus senos: enigmas del clavel.* ...
Homenaje a la cursilería de José Emilio Pacheco
dóciles formas de entretenerte, olvido: recoger piedrecillas de un río sagrado estampar becquerianas violetas en los libros para que amarilleen ilegibles besarla lentamente y en secreto cualquier último día antes de la execrada separación al filo mismo del adiós tan romántico y sabiendo...
A las musas de Alberto Lista
Doctas Pimpleas, que las verdes faldas moráis alegres del feliz Parnaso, donde Castalia su inspirante onda vierte suave; Sed a mi canto fáciles, el día, que vuestros dones celebrando grato, del padre Betis el laurel frondoso ciño a mi lira. ¿Y cuál primera mi atrevido acento dirá a Vandalia, ...
Dolorosa de Rogelio Sinán
Dolida Electra, enluta la Noche campanarios bajo erizado manto de lunas y ortigas. Siete puñales, siete, de luz lleva clavados eternizando-máscaras, espermas y cenizas. Dolorosa, amargada de cirios, titilando, pulveriza oraciones de calcárea neblina; mas, su apagado llanto, ...
Oxes de Cé Mendizábal
Dolmenita, pilares, zigurat, furor, maniobra, juego, posición, menhir, gemido, uña, cráter, agitación, percepción, percatación, sentidos que se abren, dedos, alambique, el alambique de los dedos mientras al sur el arilo enfrenta al argonauta. Poema seleccionado por el ...
Dolor, si por acaso... de Enrique González Martínez
Dolor, si por acaso a llamar a mi puerta llegas, sé bienvenido; de par en par abierta la dejé para que entres... No turbarás la santa placidez de mi espíritu... Al contemplarte, apenas el juvenil enjambre de mis dichas serenas apartárase un punto con temblorosa planta... ...
Ya verás de Manuel Acuña
DOLORA (IMITACIÓN) Goza, goza, niña pura, Mientras en la infancia estás; Goza, goza esa ventura Que dura lo que una rosa. -Qué, ¿tan poco es lo que dura? -Ya verás niña graciosa, ya verás. Hoy es un vergel risueño La senda por donde vas; Pero mañana, mi dueño, Verás abrojos en ella. ...
La ausencia del olvido de Manuel Acuña
DOLORA Iba llorando la Ausencia Con el semblante abatido Cuando se encontró en presencia Del Olvido, Que al ver su faz marchitada, Le dijo con voz turbada: Sin colores, - Ya no llores niña bella, ya no llores. Que si tu contraria estrella Te oprime incansable y ruda Yo te prometo mi ayuda. ...
Mentiras de la existencia de Manuel Acuña
DOLORA ¡Qué triste es vivir soñando en un mundo que no existe! Y qué triste ir viviendo y caminando, sin fe en nuestros delirios, de la razón con los ojos, que si hay en la vida lirios, son muchos mas los abrojos. Nace el hombre, y al momento se lanza tras la esperanza, que no alcanza porque no ...
La jurado de José Watanabe
Dolorosas mudanzas de entrecasa han convertido el cuarto de la difunta en este desordenado escritorio donde leo poemas de cien jóvenes y con ignorancia califico. En la pared queda una suave mancha de grasa donde la difunta apoyaba su coronilla...
Domingo 12 de septiembre de Ana María Rodas
Domingo 12 de septiembre, 1937 a las dos de la mañana: nací. De ahí mis hábitos nocturnos y el amor a los fines de semana. Me clasificaron: nena? rosadito. Boté el rosa hace mucho tiempo y escogí el color que más me gusta, que son todos. Me acompañan tres hijas y dos perros: ...
Mañana de ámbar (8) de MANUEL ORESTES NIETO
Domingo López Chang cometió la osadía de creer en mí. Le contaba sin parar y él sonreía. Le fantaseaba historias y las adornaba con un ritmo de tambores sobre la mesa y silbidos de aves con su boca. Nos divertíamos descarrilando un tren, disparando morteros de guerra sobre la ciudad ...
Domingo por la tarde de Alfredo Fressia
Domingo por la tarde, ya es la hora de contemplar la ausencia de mi rostro siete días postergado. Nadie impedirá un domingo por la tarde que desarme lentamente mi mentón si la mueca de angustia ha sido en el silencio que abandona el secreto de los huesos y sólo fue sudor...
Retrato de familia de José Antonio Cedrón
Domingo y Juana al frente del vapor Asimina. Faustino y su tabaco y el mismo delantal de su trabajo. Doña María y Carmen con sus cabellos jóvenes (que cuesta recordar) tomadas de la mano. Mi abuelo en sus botines y todo el desarreglo de aquel saco de lana con el que lo encontraron ...
Don Alvaro, o la fuerza del sino (fragmento) de Duque de Rivas
DON ÁLVARO: (sólo) ¿Que carga tan insufrible es el ambiente vital para el mezquino mortal que nace en sino terrible! ¿Qué eternidad tan horrible la breve vida! Este mundo, ¿qué calabozo profundo, para el hombre desdichado, a quién mira el cielo airado con su ceño furibundo! Parece. sí, que a medida ...
Doña Primavera de Gabriela Mistral
Doña Primavera viste que es primor, viste en limonero y en naranjo en flor. Lleva por sandalias unas anchas hojas, y por caravanas unas fucsias rojas. Salid a encontrarla por esos caminos. ¡Va loca de soles y loca de trinos! Doña Primavera de aliento fecundo, se ríe de todas las penas del mundo... ...
Doña Sancha acude a Vilvestre, donde ve cumplido su deseo de Los Infantes de Lara
Doña Sancha entró en Vilvestre, todos a recebirla salen, coberturas villutadas, bofordando van Mudarra a doña Sancha las manos le fue besare diziendo a altas bozes: ¡Justicia el cielo faze! Señor, d 8242;este traidor tú me quieras vengar . Entonce dixo don Mudarra a doña Sancha ...
Carta no enviada de Eloísa para Abelardo de Lauren Mendinueta
Dónde buscará tu mano Ahora que la mía es inútil. Eres infinito por inalcanzable. Arrebatada de ti Fui desterrada de la sombra del paraíso Al que no aspiro. Y sin embargo Nada más real que el sufrimiento De estas paredes Exaltadas para humillarte. Borra resueltamente ...
Diecinueve de abril, tarde de Tomás Segovia
Donde calla el amor No habla tampoco el desamor No es nunca nadie Alma fundada en la agonía Quien te rechaza Donde calla el amor Habla la estúpida Fortuna Tú misma alma de vértigo La has levantado allí Tú misma escoges que te hablen Desde un lugar que ha de tragarte...
Fe de erratas de Miguel Barnet
Donde dice un gran barco blanco debe decir nube donde dice gris debe decir un país lejano y olvidado donde dice aroma debe decir madre mía querida donde dice César debe decir muerto ya reventando donde dice abril puede decir árbol o columna o fuego pero donde dice espalda donde dice idioma ...
Amigos para siempre de Juan Bonilla
Donde dije te presto mis juguetes debe decir devuélveme mi bici. Donde dije detesto al profe de Ética debe decir no eres más que un soplón. Donde dije flipo por Laura Hernández debe decir que seáis muy felices. Donde...
Donde el ensoñado y el soñado... de Homero Aridjis
Donde el ensoñado y el soñado van por un solo camino se levanta un cuerpo Por ese adentro de mujeres que hablan de pasadas contiendas en las que no estuvimos otro cuerpo se abre y todo aquello que los cuerpos forman es en la sombra un brillo solitario ...
Nombre de Pedro Rivera
Donde el silencio crece y donde el trino desnuda el corazón de las campanas escribiré las letras más humanas con sangre de Pinzón y dardo fino. Guitarras en la noche del camino y consignas hiriendo las mañanas; no silenciar su nombre en las ventanas si decir Polidoro es un destino. ...
Himno entre ruinas de Octavio Paz
donde espumoso el mar sicilianoGóngora Coronado de sí el día extiende sus plumas. ¡Alto grito amarillo, caliente surtidor en el centro de un cielo imparcial y benéfico! Las apariencias son hermosas en esta verdad momentánea. El mar trepa la costa, se afianza entre las peñas, ...
Dónde está la sombra... de Roberto Juarroz
Dónde está la sombra de un objeto apoyado contra la pared? ¿Dónde está la imagen de un espejo apoyado contra la noche? ¿Dónde está la vida de una criatura apoyada contra sí misma? ¿Dónde está el imperio de un hombre apoyado contra la muerte? ¿Dónde...
En los bellos días de noviembre de Laura Yasan
dónde estabas cuando abrí la puerta y un hombre me alargó sus dedos sudorosos y me lamió con su mirada negra y jadeó sobre mi palabras sucias dónde estabas dónde cuando me fui con él cuando vestí de puta sólo para ofenderte cuando sangre y hedí cuando pedí perdón y caían mis lágrimas ...
Dónde estabas de Ester de Izaguirre
Dónde estabas que la vida se fue sin que te viera, en qué resquicio sórdido del tiempo, en qué mentira gris, en qué apariencia. Si volviera el verano y una señal del viento. Si todo fuera igual y descubriera en la arena alguna huella. Dónde estabas que la vida se fue sin que te ...
Cántico traspasado de Oscar Cerruto
Dónde estáis, días en flor, joyas de claridad. Tumultos. Ebrias emanaciones aurorales. Dónde, color de dicha, rosa. Rosa lustral, abierta al puro cielo del mundo impuro. Dónde cayó en qué fango tu delicia. Palía del desamparo, frío. Oh sólo noche ahora nombra tu nombre. Sólo nada...
Amor sintiendo de Aída Elena Párraga
Dónde están mis ganas de decir tu cuerpo De hablar de tus olores de tus fuegos Dónde la necesidad de decirte amor: te quiero Te quiero amor tan dentro. Donde el contarte que me siento hogar Volcán,ausol, fuego de invierno Con solo imaginar tus labios besándome los dedos ...
Dónde estará la Guillermina? de Pablo Neruda
Dónde estará la Guillermina? Cuando mi hermana la invitó y yo salí a abrirle la puerta, entró el sol, entraron estrellas, entraron dos trenzas de trigo y dos ojos interminables. Yo tenía catorce años y era orgullosamente oscuro, delgado, ceñido y fruncido, funeral y ceremonioso: ...
El instante de Jorge Luis Borges
Dónde estarán los siglos, dónde el sueño de espadas que los tártaros soñaron, dónde los fuertes muros que allanaron, dónde el Árbol de Adán y el otro Leño? El presente está solo. La memoria erige el tiempo. Sucesión y engaño es la rutina del reloj. El año no es menos vano...
El tango de Jorge Luis Borges
Dónde estarán? pregunta la elegía de quienes ya no son, como si hubiera una región en que el Ayer, pudiera ser el Hoy, el Aún, y el Todavía. ¿Dónde estarán? (repito) el malevaje que fundó en polvorientos callejones de tierra o en perdidas poblaciones la secta del cuchillo...
Canción antigua a Che Guevara de Mirta Aguirre
Dónde estás, caballero Bayardo, caballero sin miedo y sin tacha? —En el viento, señora, en la racha que aciclona la llama en que ardo. —¿Dónde estás, caballero gallardo, caballero sin tacha y sin miedo? —En la flor que a mi vida concedo: en el cardo, señora, en el...
Canción quechua de Gabriela Mistral
Donde fue Tihuantisuyo, nacían los indios. Llegábamos a la puna con danzas, con himnos. Silbaban quenas, ardían dos mil fuegos vivos. Cantaban Coyas de oro y Amautas benditos. Bajaste ciego de soles, volando dormido, para hallar viudos los aires de llama y de indio. ...